10 sacrificios que la gente hace por sus sueños

Before 2008, I was playing golf three times a week. I got distracted and entitled, started to rest on my laurels and put my family at risk. I decided to master my work and money; if my golf game or social status suffered, so be it. It’s OK to sacrifice fun today for freedom tomorrow. I sacrifice every day, doing the things I might not want to do, but doing them anyway for a better future.

Un año, cuando las tasas de interés eran del 18 por ciento, tenía grandes gastos generales y tenía una deuda de $ 400, 000. Estaba sudando a lo grande; nadie estaba comprando bienes raíces y tenía 400 agentes para apoyar. Me tragué mi orgullo y conseguí un trabajo diario en la oficina de ventas de un nuevo complejo de condominios. Mis jefes me amaban, pero despreciaba no ser el jefe. Dejé The Corcoran Group en manos confiables de mi socia comercial, Esther Kaplan, quien continuó dirigiéndolo a diario. Seis meses después, gané $ 100, 000 en salario para pagar la deuda y cubrir una parte de los gastos generales. Rápidamente me olvidé de mi vergüenza; ese movimiento rápido realmente salvó mi negocio.

My wife and I couldn’t afford to pay rent, so we decided that she would stay at her sister’s while I stayed at my mother’s. We didn’t leave each other; we just lived apart until I got back on my feet. Recently, my son (now 25) confronted me about leaving them for a year. I explained that it was necessary to build the business and give him the life he deserved. My son works with me today and is reaping the rewards. It wasn’t an easy pill to swallow at the time, but I knew the sacrifice would eventually be worth it. Today, money isn’t a problem. And it’s because I did what had to be done in order to keep building my dream.

-John Hanna, author of Way of the Wealthy and CEO of Fairchild Group

Cuando fundé mi primera startup, Snoobi, tuve que hacer algunos sacrificios difíciles. Me acababa de graduar de la universidad y no tenía dinero. Conseguí un trabajo como investigador universitario y utilicé el dinero para pagar la mitad del salario de mi primer empleado. Vendí la otra mitad de su tiempo a otra compañía, lo que eventualmente le dio a mi startup suficiente presupuesto para pagar su salario completo y ejecutar algunas campañas publicitarias. Durante un año, trabajé el doble de horas y logré llegar a fin de mes hasta que acumulé el financiamiento inicial necesario para dejar mi trabajo diario y concentrarme completamente en hacer crecer el negocio.

I’ve walked away from relationships, friends and family members a few times in my life. It was painful because I lost a piece of my heart and identity-but it was ultimately worth it. An unsupportive spouse can be the death of your business, especially if you’re just starting out, yet a supportive significant other can help spawn incredible success in all areas of your life and business.

Me declaró en bancarrota en mi primer negocio. Cometí el error de intentar comprar un negocio existente, y terminó fallando miserablemente en el primer año. Habiendo destruido mi crédito, tuve que poner en marcha mi negocio actual y aprender a administrar las ganancias. También sacrifiqué el sueño, porque estaba trabajando en un trabajo de ventas de alto nivel a tiempo completo mientras construía mi negocio por la noche. El primer año fue agotador y desafiante, pero me llevó a donde estoy hoy.

During my earlier years of building a financial foundation, my wife and I moved out of our home and rented it out. We moved into the basement of my in-laws’ home. We lived off of approximately 10 percent of our income and piled the rest into growing the business. In the initial stages of an entrepreneur’s journey, you can have lifestyle or wealth, but not both. We chose to live simply while building assets and wealth. We allowed time to compound our efforts. Imagine where you’d be in five years from putting aside 25, 50 or 90 percent of your income to invest in yourself and your business. That’s what we did and it paid off huge.

Mi trabajo como cofundador y presidente de mi empresa ocupa todo mi tiempo disponible, pero la Sociedad de Leucemia y Linfoma me pidió recaudar fondos para la investigación del cáncer de sangre durante 10 semanas, un gran compromiso y sacrificio de tiempo, recursos y energía. . Pero el cáncer está en todas partes y afecta a todos, y mi abuelo, un inmigrante sirio, siempre decía: "La familia es lo primero". Así que asumimos este desafío filantrópico como una unidad familiar, y aproveché el tiempo, quitando un poco de mi negocio para poder para perseguir mis sueños caritativos. Mucha gente dice: "Algún día ayudaré, algún día haré más". Como familia, nos dimos cuenta de que nuestro "algún día es hoy"; la banda de rock de nuestros hijos escribió y produjo una canción original llamada "Someday Is Today! " Y en dos semanas, el video musical alcanzó más de 500, 000 visitas de YouTube y más de 150, 000 visitas de Facebook. Este sacrificio de tiempo podría no haber ayudado financieramente a mi negocio, pero contribuyó a mi éxito personal.