Hogar Motivación Rohn: ¿tienes un plan para tu vida?

Rohn: ¿tienes un plan para tu vida?

Anonim

Cuando eres una persona con carácter, sabes quién eres y a dónde quieres ir. Ya has pasado mucho tiempo pensando en ello. Has estado trabajando en las partes de tu personalidad que te harán mejorar: tu actitud, tu salud, tus habilidades de gestión del tiempo. Lo has estado poniendo todo en papel. Y has desarrollado una autodirección positiva.

A medida que habla con usted todos los días, con qué frecuencia pregunta: ¿Lo que estoy haciendo hoy me acerca a donde quiero estar mañana? Porque esto es lo que nunca quieres hacer: engañarte. Bromea con tu vecino y bromea conmigo y bromea con el mercado si quieres, pero no te engañes. No puedes esperar con los dedos cruzados esperando llegar a un buen destino cuando ni siquiera te diriges en la dirección correcta. Dices: Bueno, tal vez el viento me lleve. Existe una posibilidad, por supuesto, pero es tan probable como ganar la lotería. Tienes que hacerte cargo.

Las escrituras antiguas dicen que la esperanza, si se demora lo suficiente, puede enfermar el corazón. Tienes que preguntarte a menudo: ¿Estoy realizando las disciplinas que me llevan en la dirección que quiero ir? No quiero engañarme y pensar que estoy en camino al éxito financiero cuando no hay una oración. No quiero engañarme pensando que hay alguien más que se encargará de eso. Nadie más se encargará de eso. Nadie más me cuidará.

¿Qué pasa si todos sus parientes de pensamiento negativo se vuelven positivos? ¿Qué haría eso por tu fortuna y tu futuro? No mucho. Si los precios bajaran un poco, ¿qué haría eso por su sofisticación y su cultura? No mucho. Si la economía mejora un poco, ¿qué haría eso por usted? No mucho.

Si no haces tus propios planes, encajarás en los planes de otra persona. ¿Y qué crees que han planeado para ti? No mucho. La mayoría de las personas se despierta cada mañana contando con esta lista de "no mucho". Y eso es todo lo que tienen: no mucho. No hay mucha esperanza No mucha promesa. No mucho progreso. Conducen lo que no quieren conducir, viven donde no quieren vivir, hacen lo que no quieren hacer.

Olvídate del ladrón que espera en el callejón para arrebatar tu bolso. ¿Qué hay del ladrón en tu mente? Te está tentando a que seas perezoso, no estimulado por pensamientos y preguntas. No te conviertas en una víctima de ti mismo. Hágase estas preguntas:

  • ¿Es esta la dirección que quiero para mi vida?
  • ¿Es esta la dirección de otra persona?
  • ¿Es una meta que me ha sido arraigada desde mi infancia?
  • ¿Es de mis padres, de mi cónyuge, de mi jefe o de mis hijos?
  • ¿Es mio?

Hágase estas preguntas. Entra en el debate de tu mente interior.

  • ¿Qué estoy haciendo que funcione?
  • ¿Qué estoy haciendo que no funciona?

Debate todo. Trabaja con tu mente para encontrar la mejor dirección posible para ti. Esta es tu auto dirección.

Adaptado de llevar una vida inspirada